Los candidatos instalaron el “miedo” a que el gobierno suspenda las elecciones internas obligatorias para evitar una derrota. El diputado se floreó: “La provincia tiene que ser gobernada por alguien que tenga las pelotas que yo tengo.”
La marcha, un grupo de cumbia y toda la liturgia justicialista llevaron a Francisco de Narváez a decretar que la gris jornada de ayer en La Matanza se había transformado en “un día peronista”. El candidato a gobernador bonaerense por Unión para del Desarrollo Social (UDESO) subió al estrado en el distrito más populoso del Conurbano con Ricardo Alfonsín como invitado, quien acompañó estoico con una sonrisa la inconfundible voz de Hugo del Carril.
El radical no disimuló su estrategia de mostrarse como un candidato “transversal” y vaticinó que su gobierno estará inspirado en la memoria de “Perón, Evita, Alem, Irigoyen y Raúl Alfonsín.”
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